Si digo, hablando de mi mujer, que la di una bofetada sin querer estoy cometiendo un error gramatical garrafal y un atropello a la decencia y la razón, caigo en el laísmo, frecuente en mi tierra de nacimiento, es le di, además de ser un energúmeno, y nunca una bofetada se da sin querer, porque el cerebro da la orden y la mano obedece sin más.
Alguien puede salir a la palestra y cuando se le pregunta si ETA fue una banda terrorista y trata de confundir al entrevistador y a todo buen ciudadano, que pasa por allí, encogiéndose de hombros, titubeando y mareando 10 perdices: “Fue un ciclo político”, “ETA fue un grupo, eh... armado”, “no es una cuestión fundamental”, ”las consideraciones o las denominaciones sobre una banda pueden ser diversas”, y así hasta el infinito y hasta el cansancio de las piedras y las marmotas, no es de recibo en democracia, con lo fácil que es decir, a lo llano y valiente: sí.
Puedo clamar a los cuatro vientos que la tierra no es redonda, que es plana-plana, que es lo que ven mis ojos cuando salgo a la calle y quedarme tan tranquilo de la estupidez dicha. Puedo, aunque está demostrado que por mi cabeza no corre la sangre como es debido.
Y no digamos cuando alguien que ha tenido cargos importantísimos en lo política y estando obligada a tener un nivel cultural medio, sería suficiente con ello, y conocer las lecciones elementales de historia, las pasa por alto, y comete la barbaridad, malicia, analfabetismo o ignorancia supina de negar el Golpe de Estado del 36 y su posterior dictadura con un dictador al mando y mano de hierro hasta su muerte. Lea un poco de historia, Señora.
Es como decir que el papel de la coma es baladí, con solo caer en la cuenta de su importancia capital en la frase mil veces repetida en clase de lengua: Vamos a comer niños y vamos a comer, niños.
Negar la violencia de género es como decir que el sujeto no tiene importancia en la oración, el verbo no significa nada y el complemento directo es ganas de dar guerra y complicar las cosas no dando importancia a llamar a las cosas por su nombre, como si al árbol lo llamamos mochuelo, al ajo, cebolleta, y a la mujer, ya de paso, alma descarriada al servicio, uso y abuso del hombre.
Así que sería bueno y saludable sentarnos de nuevo en el pupitre de preescolar y comenzar por la a y seguir con las primeras lecciones de sintaxis y de historia y educación para la ciudadanía: Porque la lengua y la literatura son disciplinas decisivas en la vida de los hombres. ETA fue una banda terrorista, y punto. La tierra es redonda, te pongas como te pongas. La violencia machista asesina a las mujeres por el hecho de ser mujeres y no te empeñes en darle vueltas y más vueltas al lenguaje, como si intentas convencernos de que el gato tiene 6 patas. No trates de trastornarnos ni a nosotros ni al lenguaje.
Conclusión: O ponemos orden en nuestras mentes, y aprendemos sintaxis, historia y decencia o nos vamos por el desagüe de lo más sucio. Y si la malicia y la ignorancia, por separado, o juntas, ordenan nuestras vidas, nos hundimos en la miseria más absoluta.
https://youtu.be/yXmg6aoWtWQ?si=gB_dSAT8qbrb1Ifx Gilbert Becaud-Nathalie (subtítulo en español) Todo en ella estalla belleza, una gran voz, una preciosa historia en un bello poema y una canción para no olvidar. Que lo disfrutéis como yo.
